El otoño colorea el paisaje
en
esta tarde de soles sumisos,
mientras Eolo despeina sueños
en cantos rodados
presagiando un
estandarte
de mágico enigma.
Lánguidos pasos vierten
huellas de luna
sobre esta oquedad de tibias
mariposas
y en el umbral onírico de
tus alas
cubre
primavera anhelada
cual sutil encanto
de boreal
hemisferio…
mientras pupilas
estelares
en
el manto austral de mi cobijo
gimen libélulas de plata
cual
estanque bautismal
para
inundar de luz
el abismo
occidental de esta herida.
Hola amigo te recuerdo mi blog de poesias si deseas volver a visitarlo
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